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España. El consejero delegado de Barceló EMEA, Raúl González, considera que el ciclo de crecimiento que ha marcado el turismo en los últimos años comienza a agotarse, lo que provocará una moderación en la inversión hotelera y una evolución de los precios “más racional y menos emocional”. Según el directivo, muchos fondos que entraron en el sector durante la última década necesitan rotar sus inversiones, lo que generará un “cierto atragantamiento” en el mercado de compraventas.
Para Barceló, este cambio supone una oportunidad. González ha señalado que el grupo familiar aprovecha los momentos de menor apetito inversor para comprar activos a precios asumibles y reformar su cartera hotelera en fases bajas del ciclo para reforzar su competitividad. “Vendemos cuando todo el mundo compra y compramos cuando todo el mundo vende”, ha resumido.
En cuanto a la temporada estival, el CEO ha destacado un crecimiento del RevPAR (ingresos medios por habitación disponible) de alrededor del 6% en España, aunque con ligeros descensos en Andalucía y Baleares. En Estados Unidos, el aumento fue más moderado, en torno al 2-3%.
Pese al cambio de ciclo, Barceló prevé cerrar 2025 con un nuevo récord en ingresos, ebitda y beneficios, superando las cifras históricas de 2024, cuando facturó más de 7.500 millones de euros, obtuvo un beneficio neto superior a 300 millones y un ebitda de 660 millones, un 24% más que el año anterior.
El grupo mantiene su objetivo de invertir 500 millones de euros en compras y reformas de hoteles durante este año, una cifra que podría repetirse o incluso superarse en 2026. Tras las recientes adquisiciones en París y León, Barceló anticipa nuevas operaciones antes de que acabe el año, incluyendo movimientos corporativos como la compra del 80% de Rusticae.
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